Fuente: El Mercurio

En el marco de un análisis sobre el resultado de la última licitación eléctrica para clientes regulados, donde el precio promedio de adjudicación fue de US$ 23 por MWh, el más bajo registrado, la consultora Systep plantea que si bien desde 2014 las licitaciones permitieron cambiar la composición del parque generador, dichos procesos no consideraron la necesidad de asegurar la complementariedad de las renovables en condiciones normales de operación; y mucho menos ante eventos de crisis, refiriéndose al actual escenario de estrechez en el sistema, que obligó incluso a activar un decreto de racionamiento.

«Dados los cambios que estamos transitando como país en términos de alcanzar una matriz energética cada vez menos contaminante, es importante una coherencia entre los lineamientos de corto y largo plazo», postulan. Y agregan que si bien es de gran importancia tener precios competitivos de energía para los usuarios finales, para lo cual las centrales de generación renovable variable han sido un aporte fundamental, es igual de importante identificar a tiempo las medidas, mecanismos u acciones que ayuden a visibilizar el objetivo de tener una matriz energética limpia, segura y flexible a largo plazo.